



El lado oscuro de la luna es mi hogar,
maldicion que me acoje,me acuna y me envenena...
secretos de un cielo eterno que se cae a cachos,
piezas sueltas que se desenredan en mi piel,
un destino hecho con tinieblas enamoradas,
un camino como laberinto en otro mundo perdido...
Soy aquello que no entiendo,no comprendo mis pasos,
las huellas se deshacen poco a poco,con el mar,
en la nieve,con su pálida luz de fuego...
No comprendo mi interior,no entiendo mi razón,
mi corazón carece de cordura y de emoción...
El sol parece gris,y el cielo negro,
las estrellas se despiden y en el suelo mueren,
como angeles que de tristeza perecen,
y sus lágrimas son mis penas...
Romance de la luna, luna
La luna vino a la fragua
con su polisón de nardos.
El niño la mira, mira.
El niño la está mirando.
En el aire conmovido
mueve la luna sus brazos
y enseña, lúbrica y pura,
sus senos de duro estaño.
Huye luna, luna, luna.
Si vinieran los gitanos,
harían con tu corazón
collares y anillos blancos.
Niño, déjame que baile.
Cuando vengan los gitanos,
te encontrarán sobre el yunque
con los ojillos cerrados.
Huye luna, luna, luna,
que ya siento sus caballos.
-Niño, déjame, no pises
mi blancor almidonado.
El jinete se acercaba
tocando el tambor del llano.
Dentro de la fragua el niño
tiene los ojos cerrados.
Por el olivar venían,
bronce y sueño, los gitanos.
Las cabezas levantadas
y los ojos entornados.
Cómo canta la zumaya,
¡ay, como canta en el árbol!
por el cielo va la luna
con un niño de la mano.
Dentro de la fragua lloran,
dando gritos, los gitanos.
El aire la vela, vela.
El aire la está velando.
Federico García Lorca
